LECCIÓN 216

Repaso de la lección 196

No soy un cuerpo. Soy libre.
Pues aún soy tal como Dios me creó.

(196) No puede ser sino a mí mismo a quien crucifico.

Todo lo que hago, me lo hago a mí mismo.

Si ataco, sufro. Mas si perdono, se me dará la salvación.

No soy un cuerpo. Soy libre.
Pues aún soy tal como Dios me creó.