No soy un cuerpo. Soy libre.
Pues aún soy tal como Dios me creó.
(194) Pongo el futuro en Manos de Dios.
El pasado ya pasó y el futuro aún no ha llegado. Ahora estoy libre de ambos. Pues lo que Dios da sólo puede ser para el bien.
Y acepto únicamente lo que Él da como lo que me pertenece.
No soy un cuerpo. Soy libre.
Pues aún soy tal como Dios me creó.